No me gustan las mentiras, las nubes negras, la prepotencia, las peras, la superficialidad, el rojo, la música comercial, el frío polar, la falta de confianza, las avispas, el perfeccionismo, los celos.

Me gustan las sonrisas, el verde, la alegría, cantar, el sol, la sinceridad, la libertad, bailar, las miradas de complicidad, las frases absurdas, bailar, la música, las cazadoras, el vodka,el respeto, los rotuladores de colores, reverlarme,la originalidad, los playeros, el cariño, llevar la contraria, protestar, la autorrealización y , lo que más me gusta, son mis amigos.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

el colmo

Yo no sé de qué va la gente. Un día te ama, otro te ignora. Cuentan cosas, que llegan a tus oidos, y se te clavan como puñales, uno tras otro. Poco a poco van haciendo daño, hasta que te rompen por dentro. Explotas. Estas harta. Y te vas. Pero te as para no volver...

jueves, 8 de septiembre de 2011

eso que dicen que existe

Yo no creo en el amor. En ese que dicen que existe para siempre, tu media naranja, la única persona en el mundo que te hará feliz, el destino, bla bla bla, son todo tonterías. Nadie disfruta de eso. Bueno, tal vez unos pocos afortunados. Casi me atrevería a decir que solo esos de las pelis. Eso que nos venden. Vamos, abrir los ojos. No, no existe.

Yo creo en las casualidades, en la felicidad momentánea, en eso que te recorre de arriba a abajo cuando te besa, en la magia de una mirada, en la seguridad cuando te abraza fuerte. Pero en nada más. Sí, puede que no me haga ilusiones, ni tenga cas esperanzas, ni haga planes de más de un mes (casi de más de una semana). Pero si no las tengo, no las puedo perder nunca.

Pero yo diría que soy feliz. Quizá mañana me toque llorar por lo que perdí, pero preiero no pensarlo. Me conformo con que me hagas reir hoy también.

viernes, 2 de septiembre de 2011

stanby

Hay veces que nadie te puede ayudar. Por muchos abrazos y muchas palabras de ánimo que escuhes, la que te enfrentas a la verdad eres tú sola. Es muy duro. Estar en la espera de que será. Puede ser que sea insignificante, pero quizá marque tu vida para siempre. En verdad, de nada vale darle vueltas. Lo que sea, será. Y tú sola tendrás que aprender a aceptarlo y a vivir con las consecuencias. No es que no acepte tu ayuda, ni que no la valore. Pero la verdad solo chocará contra mí.